Escrito por: Jude Bokovoy

Por fin ha llegado el momento. A algunos les ha llevado una década, a otros tan sólo tres años. Sin embargo, es un logro del que sentirse orgulloso. Para algunos, es un título más en su trayectoria educativa; para muchos, es la línea de meta. Sea cual sea la situación de cada uno, hay algunas cosas en las que pensar. 

Ir a eventos - Esta es la última oportunidad de ir a un evento de Western como estudiante. Si algo suena interesante, hay que ir a verlo. Si te invitan personalmente a un acto o a una entrega de premios, haz tiempo para asistir. Allí es donde se forjan los recuerdos y donde uno puede crear respuestas interesantes cuando le preguntan por su experiencia universitaria. 

Postura postgraduada - Una pregunta que muchos se hacen tras saber que uno se gradúa es "¿cuáles son tus planes para después de la graduación?". No importa si uno tiene o no un plan específico, recuerde que lo único que importa es cómo se siente uno personalmente. Lo que de verdad importa es que uno persiga sus objetivos con pasión. Todo saldrá bien. Todo el trabajo duro ha servido para algo. Las oportunidades están ahí, sólo que puede que aún no se hayan revelado. 

Apóyate en tus compañeros de promoción - Este es uno de los pocos momentos de la vida en que uno está rodeado de mucha gente en circunstancias muy parecidas. Utilice la comunidad de graduados como fuente de alivio. Apóyate en tus amigos, pregúntales cómo les va y libérate de preocupaciones personales. Pasa tiempo con ellos porque, para la mayoría, ésta será la última semana con ellos. 

Póngase en contacto con el autor en howllifestyle@mail.wou.edu